Les comparto un TESTIMONIO, donde se evidencia que la autoestima es la beneficiada, y lo que una experiencia de estas puede provocar es un tesoro invaluable:
"He de confesar que durante mucho tiempo tuve problemas con mi aceptación física, así que cuando se me da la oportunidad de hacer una sesión así, aunque siempre me llamo la atención, sentí ese temor o angustia, pero era algo que necesitaba hacer, y simplemente no hay palabras; es algo que te da una perspectiva personal, una visión propia que no notamos, un resultado hiper positivo.
Al principio me costó un poco sin embargo la confianza, respeto, armonía que me generó el fotógrafo durante la sesión, me hizo sentir libre, cómoda, más segura de mí.
Muchas me ha preguntado ¿pero cómo hizo?, ¿qué se siente? y solo les puedo decir que el primer paso es atreverse, porque se te abre un nuevo mundo, un trampolín que mejora tu autoestima; más allá de una pose o de lo que se deje ver en una foto, es la seguridad que fluye en el proceso, esa que yo tenía muy guardada.
¿Que sí volvería a hacer otra? claro que si, con la diferencia de que quizás ahora me atreva un poco más, porque sé lo bien que me voy a sentir con el resultado y lo orgullosa q voy a estar; definitivamente, el ambiente, la paciencia, la seguridad con la que yo me sentí al momento de hacerla no tiene precio."
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